PERO ESO, ESTO NO ME CONSUELA

La verdad, no es que no me guste vivir, pero poco sentido tiene sabiendo lo que el final nos depara. A nadie le emociona dormir eternamente, ya lo sé, y sepan, aunque no me crean, que no me preocupa la muerte. Me duele, de manera simple, saberlo. Hagamos lo que hagamos pasará lo que sabemos que tiene que pasar y ¿de qué habrán servido tantos años de lucha? Sudar las lágrimas que fabriqué, romper las fuerzas que no derroché, malgastar las risas que gané y que desaparezcan todos los segundos que recuerdo. Casi nada, como quien descubre su parpadeo e intenta por todos los medios olvidarse de lo que está pasando. Como quien escucha un taconeo de lejos, que le persigue y corre en su busca para descubrir qué linda mujer se esconde detrás de esos pasos. Algunas mentes menos egocéntricas me hacen pensar que es bueno abandonar esta tierra para dejar un lugar a otro individuo, otro más nuevo. Pero eso, esto no me consuela, sobre todo sabiendo que a él le pasará lo mismo y no estaré para avisarle. Para decirle que en lugar de tirar adelante deje que de eso se encargue el tiempo, que se siente a ver cómo los demás se desgastan y al final decida cuándo quiere abandonarlo todo. Para pedírselo aún sabiendo que yo no lo haría y aún sabiendo que él tampoco. Y aún sabiendo que, al igual que respiramos sin saberlo moriremos sin quererlo.

5 comentarios:

  1. nenaaaaa, que triste, pero que bonito!!!! Joer, yo quiero escribir y pensar com tu!!!

    Ailobius!

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  2. Pero es que la lucha no es en contra de la muerte. La lucha de esta vida es precisamente vivirla. Y la otra ya llegará.
    Todo es caduco, hasta nosotros, pq si no lo fueramos yo caería en la locura. Un tiempo eterno sin fin... me da miedo.

    ¿Y que sería del dicho que nos permite hacer locuras sin remordimiento? ¿Ese dicho que dice "A vivir que son dos días!"?

    Quizá somos desdichados pq el ser humano es el único que es conciente de su propia vida y muerte... qué desgracia!

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  3. "Al día siguiente no murió nadie"
    Así comienza "Las intermitencias de la muerte" de José Saramago (hoy no ha podido ser, pero cuando nos veamos, te lo regalo), no es su mejor novela, pero...ya desde esta primera frase incita a la reflexión. Una noche de Fin de Año, justo a partir de la medianoche, Año nuevo ya, de repente deja de morir la gente. La Muerte se toma un respiro, unas vacaciones, se pone de huelga, y precisamente en Nochevieja, una noche lamentablemente nefasta donde las haya por lo general en cuanto a accidentes de tráfico u otro tipo de disturbios y acontecimientos producto del alcohol y la fiesta. La gente está extrañada; no están acostumbrados a que no muera nadie un día , y menos en Nochevieja, pero aunque extrañada, se alegran al fin y al cabo, es una buena noticia. ¿No nos alegraríamos nosotros si no vierámos en los titulares de un periódico o de un telediario que no ha habido muertos un día? Sí nos alegraríamos, como no, pero lo curioso ya sería que eso siguiera igual día tras día.. ya empezaríamos a mosquearnos, a extrañarnos y ya finalmente a preocuparnos seriamente. Pues esto les pasa a los habitantes de este país en la novela de Saramago: que la Muerte se ha ido definitivamente de vacaciones. Y lo curioso es que sólo pasa en este país , en el resto del mundo la vida y la muerte siguen igual, debatiéndose la una con la otra.. pero, ¿Qué ha provocado que no quiera más la Muerte pasarse por aquí? Esa pregunta se la hacen todos.

    Besucos desde muy cerca.

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  4. Lo mismo es que no vales la pena, por cruel que suene decirlo asi.

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  5. Es una paradoja "luchar" para morir
    K.

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